Lo cierto es que, el pasado sábado, Esther, se acordó de una idea que ya tenía en mente desde hace algún tiempo. ¿Por qué no vamos a un bar de hielo? Dado que no teníamos ningún plan definido - bueno, si lo teníamos pero se nos vino abajo - nos decidimos a visitar uno de los dos únicos bares de este estilo que hay en Madrid. El sitio en cuestión se llama Ice BaRetiro y se encuentra en la calle Alberto Bosch, justo detrás del Museo del Prado. El precio de la entrada es de 10 € e incluye una consumición. Evidentemente, entre semana, de lunes a jueves, es más barato - creo que 5 €. Además, también tienes la opción de disfrutar de una cena en el mismo local antes de entrar al bar de hielo, propiamente dicho.
Una vez pertrechados para acceder al lugar - los guantes y el abrigo de esquimal que os presta el local son obligatorios si no queréis perecer en el intento - descubriréis un sitio no muy grande pero si bastante acogedor. La temperatura, según me comentó Teresa, rondaba los -8ºC. Esto no es nada que asuste a un "macho soriano" como yo, sin embargo, no es recomendable pasar allí mucho más de media hora. Por otra parte, en lo que se refiere a las esculturas, he de deciros que son de lo más variopintas y, por lo que tengo entendido, se cambian cada cierto tiempo. Van desde un oso y un madroño hasta una figura del malo de "Scream", pasando por la propia barra del bar, esculpida totalmente en hielo.
Lo dicho, si tenéis la oportunidad, no dudéis en visitar este lugar. A mí me encantó y para gastarme 10 € en tomarme una copa en un pub normal, prefiero hacerlo en un lugar como éste, en el que por lo menos disfruto de un marco original. También os he de avisar que, aunque no seáis muy propensos a bailar en público, en este caso se os olvidará por completo la vergüenza y vuestro cuerpo se moverá casi sin daros cuenta. Por cierto, los vasos tienen un sofisticado sistema antirrobo; desaparecen si los sacas del local. ¡Venga esa cerveza bien fresquita!
Iremos a la Bolera, no te preocupes, corazón!!!! :D
ResponderEliminarPero que bar más chulo!! Por cierto me encanta tu blog, a ver que nos cuentas mañana! :)
ResponderEliminarjeje, qué guay!! podías elegir los plumas o los de chicos eran plateados y chicas, negros? es que vais tan conjuntados... :-P
ResponderEliminarCreo que dependía del tamaño. Según me pareció cuando nos los estaban dando, los plumas grises eran de tallas más grandes que los negros.
ResponderEliminaruna pregunta: no se te quedaba la lengua pegada al vaso??
ResponderEliminarNo, pero siempre que no la dejes mucho tiempo en contacto. Si te quedas sin saliva, estás perdido.
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